I
PRIMER QUINQUENIO
Poco se acuerda una, de las primeras horas de vida,
así sean miles de horas que se convierten en años. En realidad, no voy a mentir
y diré que no me acuerdo de nada, quizá este condenado a una mala memoria. Sin
embargo, si puedo decir y recuperar recuerdos inducidos. Es decir, contare lo
que me cuentan mis familiares de lo que yo fui.
La primera nota disonante sale de una clínica al sur
de Bogotá, en donde viviría toda su infancia y hasta un poco mas del Tercer
Quinquenio. Recuerdo...-Ahh verdad que no recuerdo- Me hacen recordar, que me
decían que se me cantaba una canción a la hora de dormir, a mi y a mis dos
hermanas también. Dueerrrme dueeerme negritoooo, que tu mama está en el campooo
negritoooo. Y buenos pues eso les cuento. Por si no queda clara cuál es la
canción, es Duerme Negrito de Mercedes Sosa. Los padres también tuvieron el
privilegio de estudiar y ser profesores y póngale... además, para ese entonces
se daba la música protesta con gran fuerza entre las clases populares y
académicas marcadas por una pelea que siempre ha buscado una vida mejor para la
gente popular. Y bueno… pues así creo que es el contexto en el que nací, pues
que me cuentan.
Dicen que la mama se graduó de la universidad con un
bebe en la panza, un bebe disonante. Este bebe convivió mucho rato con los
abuelos quienes le cuidaban mientras los padres comenzaban a trabajar en sus
primeros colegios, que como raro, las condiciones para los recién graduados
nunca son las mejores, se deben doblar en trabajos, con sueldos paupérrimos,
pero bueno ese tema ya ustedes lo conocen, pues no ha cambiado mucho desde
aquellos tiempos. Eso es pues una primera etapa, de vivir bien, mientras los
papas se jodían por conseguir lo necesario para vivir. Unos días no estaba el
padre, pues tenia que trabajar, otros días no estaba la madre y a veces ninguno
de los dos, pero aprovechaban los momentos que estaban para cantarnos
precisamente esta canción, que si se ponen a escuchar, es bien critica, o mas
bien relata lo que debe hacer los padres para sobrevivir, mientras el pelaó se
queda en casa con alguien mas que le cuida.
II
SEGUNDO QUINQUENIO
Tierra, barro, terreno para correr, árboles que
trepar, mangos biches para comer con sal, animales, todos/as durmiendo en la
misma pieza, sapos, serpientes, campesinos, trabajo, sembrar, madrugar,
quebrada, nadar, estrellas brillantes, miedo a la oscuridad del campo. Esa era
la vida de este vergajo, claro cuando se podía ir al pedazo de tierra, pero la
pasaba allá mas de lo que se cree, las vacaciones, los fines de semana, en fin,
cuando se podía. Ese muchacho jugaba a escondidas con la familia y amigos que
vivían en las fincas cercanas. Pero la tradición era jugarlo de noche, cuando
se podía jugar a difuminarse con la oscuridad, entre los árboles, detrás de las
rocas, o simplemente tirados/as en el pasto tupido quien camuflaba cualquier
pelao/a de no más de un metro de altura. Múltiples historias paranormales que
se creaban en la mente a partir de los relatos de los lugareños, Brujas,
Duendes, Hombres sin Cabeza sonaban cada vez que, al calor de muchos tragos,
los adultos se degustaban y los pequeños, alrededor de una fogata escuchaban
atentamente historias que no dejaban dormir tranquilos/as en la noche. Jaaa,
sumerce se debe acordar de su niñez y de lo traumante que era cualquier evento
paranormal contado o visto a esas edades.
Mini cuento paranormal de noches de escondidas:
Eran las 10 de la noche, y los adultos compartían
algunos tragos en la finca próxima a la que nos convocaba. Cuatro pelaos/as
inquietos, entre esos, el tono disonante. Se cansaron de ver a los adultos
tomar- Wilson agg yo estoy cansado, hagamos algo, vamos a jugar a la finca
aprovechemos que esta sola- Vamos, dice Wilson pero digámosle a Nana y a Lorena
y bueno también a Yudi. Yudi era la prima mayor, que no pasaba de los 15 años
en ese momento. -Nos vamos a la finca a jugar, cualquier cosa venimos- Le dijimos
a los adultos- Bueno, pero mucho cuidado por ahí- responden ellos. Empezamos a
caminar, para llegar a la casa se debía recorrer un camino sin pavimentar con
subidas y bajadas, unos 10 min caminando, pero como era finca, solo había un
poste lejano que alumbraba, pero eso no era problema porque el camino ya no lo
sabíamos de memoria, que piedras había, por donde se podía pasar, que árboles.
En fin, estaba muy naturalizado el camino. Alla a lo lejos vimos la luz de la
casa, y nos dirigimos corriendo para aprovechar el tiempo. --¿Tenemos llaves?
Pregunta yudi- Todos nos miramos y ninguno había sido capaz de pedírselas a los
adultos. –Ag bueno, ya que, nos toca jugar acá afuera porque yo no me voy a
devolver y menos solo—Uy si que pereza respondieron los demás. Así que
prendimos una luz metiendo el brazo por una de las ventas, por lo menos nos
alumbraba a unos 5 metros y ello era perfecto, porque para las escondidas la
oscuridad era una aliada. Una aliada que se convertía en enemiga cuando
llegaban recuerdos a la cabeza de los relatos macabros que contaban. Jugamos
zapatico cochinito para decidir quien iba a ser el primero en buscar. La
dinámica del juego definió a Yudi. En esta primera ronda no paso nada, jugamos
normal sin ningún acontecimiento. Al tono disonante lo pillaron de primeras y
por ello le toco contar en la segunda ronda. Ahí la mente recordó las
historias—Hpta, mal momento para recordar, pero bueno ya que... 1, 2, 3, 4, 5,
6 … 100, 200…1000 Salgo a buscar—gritó. Caminando la finca, encontré a Willson—123
por Willson. En ese momento entra una llamada al celular del tono disonante.
¿Una llamada de mi Madre—Alo? Alo?- gfshhhshhs sonaba interferencia y algunos
murmullos que no se entendían.—Alo mama? Aloo? ¿Ve colgaron—¿En ese momento
vuelven a llamar, Alo? Alo? Y se escuchaba siempre lo mismo. El proceso se
repitió unas cinco veces y siempre se escuchaban unos mormullos acompañados de
interferencias. – ¿Que paso? Dice Yudi—Que me llama mi madre, pero no dicen
nada respondió, en ese instante de la oscuridad sale Nana preguntando lo mismo.
Y le contamos, allí nana dice—pero no puede ser, miren, asómense por la ventana
de la casa y vean que el celular de mi mami esta encima del comedor, ahí se ve.
Un escalofrió entra por nuestros cuerpos—Uy no nana con eso no se juega, porque
se escuchaban murmullos, no diga eso—Si vean asómense y vean. Los/as cuatro
cagados del miedo nos asomamos, y efectivamente allí se encontraba el celular
de mi madre. Todos nos miramos, con ganas de querer salir a correr-- ¿Y Lorena?
Donde esta Lorena—nos empezamos a preguntar—Ella no había salido aun del
escondite-- ¡LORENAAA!! Vamonos, Lorenaaaa vamonos. Salga que nos están
asustando, gritábamos desesperados. Y lorena nada que aparecía. Voy a entrar
por la ventana para coger el celular—dijo el tono disonante. Noo! Como se le
ocurre, busquemos a lorena y vámonos de acá ya—Dijo Yudi. Como buen terco y con
un gran susto intenta entrar por la ventana, a lo que se va encaramando ve en
su reflejo una cara blanca, blanca como de papel de impresión, unos ojos
grandes y negros, con el pelo negro negro—Mierda, mierda se cae el tono
disonante al suelo, pálido pálido. Los demás llegan ¿Qué paso? ¿Qué paso? Le
preguntan—Muy ofuscado y respirando fuerte—Vi una cara de una mujer blanca en
la ventana vamonos vamonos. Todos/as muy asustados/as emprendieron la huida, de
lo que fuera, así no le hallan visto, pero uno si la vio. Allí no había
aparecido lorena toda vía. Cogimos a todo pique el camino que conducía a la
finca vecina, en donde se encontraban los adultos. A mitad de este, en plena
oscuridad vemos a Lorena que caminaba lentamente hacia donde los adultos, muy
tranquila, sola. Lorena!! Lorena!! Corre que no están asustando. Lorena voltea
la cabeza y les mira como pasmada y pregunta ¿qué paso? ¡Que nos están
asustando! Vámonos! ¡Corre! Extrañamente Lorena siempre ha sido la mas
asustadiza, era menor que nosotros unos dos años menor y siempre manifestaba un
pánico a la oscuridad. Pero iba caminando sola, tranquila y no respondía a nada
de lo que le preguntábamos, ni si quiera quiso correr. Nosotros llegamos
asustados a contarle a los adultos, y Lorena se quedó atrás caminando
tranquilamente. Unos tres minutos después, cuando contábamos todo lo sucedido
llega lorena gritando y asustada casi llorando ¿Por qué me dejaron sola? ¿Por
qué no me dijeron nada? Al contarle que sí, que la vimos y que ella no
reaccionaba, contesta: Yo nunca me moví de la piedra al lado de la casa, allí
me quede escondida todo este tiempo y cuando Sali ya no había nadie y me vine corriendo.
TERCER QUINQUENIO
Al que no suena parigual
A ese que no guarda consonancia
Majestuosa desvariada
Huérfano de armonía, pero esencialmente armónico
Que fluye aun sabiendo que no cuaja
Símbolo de la tierra alta
Aquella estaca donde el cóndor descansa
Descansa de la condenada injusticia
Di<<<strabe de la ruana azotada por el viento frio que quema
Como esos viejos arboles batidos por la esperanza de ser rememorados
Iza orgullosamente colores, formas, bailes y mambe
Cordillera heterogénea que no comprende generales
Duro como la arcilla atravesando el tiempo de la mano de la resistencia
Suena como el viento, fuera de sí, como incontrolable
A veces le han querido llevar a la fuerza a lo clásico
Pero se queda, se queda contra todo porque sabe que pertenece allí
Tampoco se asusta de contendientes guitarras
Que siendo más grandes en tamaño
Y este más pequeño
Sabe que no hay guerra entre amigas sonantes o disonantes
La guerra es contra el olvido y el des-instrumentismo
No se asusta pues sabe que los vientos le acompañan
Solitario suena bien, pero acompañado estremece.
Come maíz, chicha y lucha
Siembra papa, arracacha y especias.
Su mayor logro ha sido unir, juntar, contar y llorar
Su gran utopía es la fraternidad entre pueblos
Y aunque no se le conozca, no deja de sonar.
Dos tonos disonantes se conocen, se enganchan y ahora
se quieren. Mas porque es símbolo de unión con la familia, porque busca decir
cosas, porque, aunque suena, no es solo cuestión de sonar es cuestión de decir.
IV
CUARTO QUINQUENIO
A la compañera de Sangre con la que se conspira. Llego
en el primer quinquenio y siempre se tuvo una muy buena relación. Con la que
hemos viajado y construido, peleado, guerreado, tomado, en tusado, lo que
fuera. Momentos que permitieron crear una relación muy fuerte de compañerismo y
hermandad. Grandes borracheras con altos niveles de baile se han vivido.
Cuentos de descontrol
Habíamos terminado un mural en la Universidad
Nacional, un mural en rechazo al asesinato sistemático de los y las lideresas
sociales. Terminando de guardar las pinturas en la bodega estudiantil. – Vieron
que hay una fiesta bailable a dos cuadras—pregunta Andrés—Si, ¿Vamos a ir o
qué? Dijo Leidy. Cansados, pero con ganas de seguir compartiendo, unánimemente
respondimos todos y todas que sí, éramos unas 6 personas. Siendo las 8 pm
decidimos salir, pues la Universidad ya estaba muerta, no había casi nadie. —¿Nos
tomamos unas polas antes de llegar? Esta muy temprano para llegar, Dije. --¿Cuánto
es que vale el cover? Pregunta La Sangre. —Como cinco lucas, pero son
conocidos, de seguro nos lo dejan más barato, responde Andrés. —Listo, así si
puedo poner dos lucas para las polas—yo tengo mil pesos ¿sirven? —pero claro
que sí. —yo dos mil—yo dos lucas—yo también pongo dos lucas. —Listo con eso son
alcanza. Tres pokerones para seis personas y cigarros. Nos sentamos por la 26
afuera, en unas banquitas donde había más gente también bebiendo. Alli nos
dieron las nueve y media—bueno ¿vamos o qué? Pregunte. —Si vamos, vamos ya es
hora, respondieron. Pero antes una meada—Jueputa, por eso es por lo que uno no
debe beber pola en la calle, debimos tomar chorro me dije a mi mismo mientras
me acercaba a las rejas de la universidad para orinar, siempre la mirada arriba
por si llegaban los tombos, por que que gonorrea que le ponga una multa a uno
por orinar en la calle. Y así, orinamos uno por uno los hombres del parche, que
éramos cuatro. Y emprendimos el camino hacia el lugar de la fiesta. Al llegar
encontramos mucha gente conocida, de la pedagógica, de la nacional, gente que
no estaba en la universidad pero que pertenecía a los movimientos sociales y
nos habíamos visto la cara mas de una vez en movilizaciones, marchas, plantones
etc. Entonces todos saludamos y ya para entrar pedimos rebaja para el
cover—Bueno, porque son socios y socias tres lucas cada uno—Listo respondimos
todas y sacamos de nuestros bolcillos lo del cover y entramos. El lugar era una
pescadería, que en las noches prestaba sus instalaciones para las fiestas.
Estaba lleno, y al fondo una mesita apenas para los que éramos. Me dirigi a la
cocina y pregunte que trago vendían—Manito tenemos media de néctar a 17 lucas,
ron viejo de caldar, la media a 22, pero también tenemos la que no falla
nunca—Cachaza a 10 lucas—Ah no esa es, deme dos. Esa ronda la invitamos, la
sangre y yo. Quedándonos sin un peso.—Cuando nos dirigimos a la mesa, ya todo
el parche estaba acomodado y sacamos como si se tratase de un premio, las dos
cachazas. Todos muy contentos con la compra, empezamos a tomar, sin olvidar
nunca el brindis del primer chorro—Un trago para las animas los que y las que
han caído. Ese chorrito de cachaza cae al suelo como melancólico, o no, en
realidad, los melancólicos éramos nosotros, pues ese trago traía un contenido
simbólico muy resaltado por los que han perdido amigos, novios, o simplemente
compañeros en este país lleno de paramilitares gobernando y asesinando. —Vamos no
decaigamos que la alegría nunca nos la podrán arrebatar—Vamo a azotar baldosa
como es, dijo Leydi. Y asi se nos fue la noche, bailando, cantando, coreando,
gritando, perdiendo, bebiendo. Mas cachazas iban llegando a la mesa y ni se
sabe de donde ni quien invitaba, solo sabíamos que llegaban a la mesa y nos
ponía contentos. –La policía, la policía todo el mundo en silencio, gritan
desde la puerta. Apagaron la música, yo ya veía borroso y varias de nosotras se
le veía tambaleando, no eran ni las 1 am y ya estábamos a tope de alcohol.
Entra uno de los organizadores que venia de hablar con los tombos y dice—Lo
siento gente, la fiesta se tiene que acabar por que ellos quieren que se acabe.
—Nooo, que se abran grita la gente. En ese momento entra la policía y dice,--Todo
el mundo pa fuera. Jaaa mano eso fue como si encendieran un fosforito en la
gente.—Que va, vallase usted, o que se va a parar con todo el mundo.—Su
compañera que hablo con nosotros, e intento sobornarnos pero se equivocaron con
migo y me la llevo a la UPJ, en ese momento la agarra de la chaqueta. Y ahí
jueputa, se arma el mierdero. Mucha gente se le mando al tombo y el saca el
bolillo. Pero en ese momento empiezan a volear botellas de cerveza vacías
contra el tombo, plas plas, el sale corriendo y llama a su compañero. Pero una
horda furiosa sale de la casa y enciende a los dos policías a botellas, en
realidad casi ninguna les pegaba, caían a sus pies o simplemente pasaban
rozando sus cabezas. Yo vi a la sangre que estaba muy cerca de los tombos, alegandoles,
cuando de repente uno de los policías le lanza un bolillazo y le hace caer, y
en ese entonces yo corri y me llego al pecho del tombo una patada voladora. Eso
quedo asi, llamaron por radio al ESMAD y tres camiones para cargar a todo el
mundo. En eso todo el mundo se despliega por las calles, no sin antes despojar
sagazmente a los policías de sus cascos de moto, las llaves y además con un
patadon votar la moto al suelo. Yo me fui con la sangre, durmiendo en un parque
hasta que amaneciera y se pudiera colar en Transmilenio. Que noche tan fría,
pero tan calurosa, pues no estaba solo estábamos respaldados y eso los dos lo
sabíamos.
V
QUINTO QUINQUENIO
La contradicción, la ilusión, el amor- La desilusión y
el desamor
Poco me referiré a este quinquenio, es precisamente el
que se esta viviendo y tristemente pero felizmente ha sido uno de los mas
dolorosos y felices que se han vivido. No se en que momento uno se vuelve un
ser desagradable con las demás personas, quizás, justifica todo en el hecho ególatra
de querer vivir la vida a tope. Pero ¿Y qué pasa con el daño que uno ocasiona a
las demás personas que ama? ¿En que momento la felicidad ya no era suficiente
para ese amante del amor? Así va esta historia, llena de tristezas, llena de
dolores, llena de miedos, llena de confusiones, llena de momentos desleales, traiciones,
pero, por otro lado, llena de mucho amor ¿Saben lo difícil que es encontrar a
una persona con la que entenderse? Pues les cuento que la encontré y ella para
mi significo mucho tiempo de entrega y amor, y que después se derrumbó poco a poco.
Principios de vida que se consideraban irrevocables dentro de la vida personal
se fueron difuminando, y se paso por encima de ellos, yo pase por encima de
ellos. Puedo decir también que ha sido etapa de crecimiento, de dejar miedos, de
asumir tareas, tiempos en los que se me confronta desde las contradicciones y
creo que he aprendido bastante. Tiempos de sentirse una basura de persona, pero
también tiempos de sentirse con la capacidad de hacer cosas nuevas. Tiempos de
depresiones, tiempos de felicidades y placeres como nunca. Tiempos de descuidos,
y tiempos de valiosa estadía. Tiempos de borracheras incontenibles y tiempos de
absoluta calma. Momentos de engorde y momentos de esbeltez. Momentos de alta lividez
y momentos de disfunción eréctil. Tiempos de Weed y tiempos de cigarrillo.
Tiempos de baja importancia académica, y tiempos de profunda pasión por
escribir. No escribo mucho pues tal vez, no haya vivido nada y a la vez lo haya
vivido todo. Tiempos de contradicciones ya lo ves. Pero esto que escribo es de
profundo sentir, pero también de palmo general que no dice nada. Este momento
de la vida, se lo dedico a la persona que me hizo soñar y me hizo feliz pero
que yo hice sufrir. Contradicciones ¿si pillas? Me voy, pero me quedo. Me voy
de acá, pero me quedo a vivir lo que falta, y lo que no estará.
Epitafio de Vida
Vida bicolor donde se entregó lo que pudo
y lo que no, queda.
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