jueves, 23 de julio de 2020

AUTOBIOGRAFÍA FICCIONALIZADA CRONITO

Por : Yeisson Johanny Tapasco Sanchez 

             Fíjate bien - Juanes 


    


                PRIMER QUINQUENIO : 

                Fíjate bien donde pisas, fíjate bien cuando caminas no valla ser que una mina te desbarate los pies, Recuerdo que me gustaba mucho esta canción, aunque no comprendía el trasfondo de su letra ni lo que quería decir, pero en una remota parte del Tolima nos empezaron a regalar cuadernos con esta letra e imágenes infantilizadas de niños que caían en estos campos minados. En la escuela nos dictaban instrucciones para no caer en las famosas minas quiebrapatas, también tengo presente la figura de mis padres advirtiéndonos a mi hermano mayor y a mí, que no recogiéramos cosas del suelo, menos si eran brillantes y que tan poco jugáramos muy adentro de la vereda. Además, que si pasaba gente extraña o con uniformes fuéramos de inmediato a la casa, ellos trabajaban casi todo el día entonces la mayor parte del tiempo de mi niñez la viví en pilatunas con mi hermano. Cuando llegaban mis padres nos contaban historias, jugábamos y con emoción recuerdo las onces que consistían en un chocolate, queso y pan. Un día nos encontrábamos jugando varios niños a las escondidas, estaba Maicol haciendo la cuenta regresiva para empezar a buscar a los demás jugadores que eran aproximadamente 10, grito ¡listo!, todos empezamos a ocultarnos cuando un fuerte sonido nos dejó congelados, había mucho polvo levantado, personas adultas corriendo y fue cuando vi a uno de los niños ensangrentado y sin una de sus piernas y como dice la canción “solo sé que hay un cuento que parece que no termina aquí”.

            SEGUNDO QUINQUENIO : Espinal - Tolima 
            
Ciudad | jose-manuel-trianna
                
            Espinal Tolima, crecí entre campos de arroz, algodón y sorgo, recuerdo el calor insoportable a mi familia, hermanos, primos y padres, fue una época donde me desplazaba al colegio en bicicleta, los fines de semana realizábamos el tradicional paseo de olla habían muchas sonrisas, competencias de nado y la familia estaba muy unida, era un pueblo tranquilo, me trae recuerdos de olor a mango, campo húmedo, ardillas y un montón de aves de varios colores, los peces que con ilustración de mi padre aprendí a pescar en uno de los brazos del río magdalena.

            TERCER QUINQUENIO : 



            Esta etapa de mi vida fue por mucho una de las más difíciles de sobrellevar pues a raíz de un problema médico perdí la visión quedando en total ceguera, el apoyo de mis padres y familiares en general fue fundamental en mi vida para poder superar esta situación. Guardo en mi mente y corazón la última imagen de mi madre al darme la bendición antes de entrar en aquella cirugía que cambiaría muchos aspectos de mi identidad, personalidad al punto que hoy en día siento que ese adolescente y la persona que soy ahora no tienen ninguna relación más que recuerdos aislados de otra vida y otros tiempos. No obstante, estas duras experiencias me han permitido conocer otras formas de relacionarme con el mundo, desarrollar mejor los sentidos del olfato, el gusto, el tacto, el oído y demás sentidos que se están estudiando en la actualidad, pero sin duda el bastón guía es aquel objeto que antecede todo lo que haga, diga y como me ven los demás, pues este objeto es el símbolo del ciego, también debido a este objeto siempre tengo una mano ocupada, solo tengo mis manos libres en la casa o en espacios que conozco lo suficiente como para no usar bastón, pero a todos los lugares que vaya (colegio, universidad, etc. etc.) lo tengo que llevar.

              CUARTO QUINQUENIO :  
            
                La llegada a la ciudad de Bogotá trajo consigo nuevos retos, nuevos amigos y nuevo colegio, recuerdo particularmente mi primer día en el Rodrigo Lara Bonilla de ciudad Bolívar, escuche una voz de un compañero que me saludo y me pregunto que si quería ir hacia algún lado, le contesté que quería comprarme un tinto; a partir de ese momento Vladimir se convertiría en mi mejor amigo, pues con él pude creer que podía seguir teniendo una vida “normal” haciendo cosas que realizaban las demás personas de mi edad, fuimos a los primeros quince de las compañeras, estuvo ahí en mi primera borrachera, en los trabajos de grupo, me ayudo a organizar mi fiesta de 18 años donde llegó casi todo once a mi casa, la primera vez que fui a una discoteca estuvo hay cuando tuve mi primer amor y cuando lo perdí y aún hoy en día Vladimir más que un gran amigo es un hermano, un confidente que nunca me vio con lastima o pesar.

            QUINTO QUINQUENIO : 

            La entrada a la universidad pedagógica nacional fue un acontecimiento que me llenó de felicidad, pues cuando me encontraba buscando mi nombre en los listados no podía creer que hubiera pasado a la educadora de educadores y a diferencia de otros compañeros esta no fue mi segunda opción, me alegro de haber ingresado de haber conocido personas con tan diversos puntos de vista e ideologías que enriquecen y constituyen lo que ahora soy con sus historias, narrativas acciones políticas y manteniendo el sueño de poner un granito de arena en esta sociedad al culminar los estudios.


EPITAFIO EN VIDA 

             Aquí yace un cuerpo marcado por las cicatrices de la vida, pero que también gozo de experiencias que enriquecieron su ser. Conoció personas que se narraron con él y él se narro con ellas... " Lo que no me mata me hace mas fuerte" Nietzsche. 

 

No hay comentarios:

Publicar un comentario